Es una posibilidad, en especial en los barrios privados. Al cerrar el espacio con aberturas se gana un ambiente que puede aprovecharse todo el año. Pueden ser de acero, aluminio o madera y su costo oscila entre $20.000 y 50.000 por metro cuadrado
La cercanía del frío motivó a que varios propietarios que residen en barrios privados o en viviendas cerca de un entorno verde se decidan por cerrar las galerías que conectan hacia el exterior, para no perder el encanto de estar a pasos y a la vista de lo natural, pero dentro de la propia vivienda.
Fuentes del mercado advierten un auge en obras así y sugieren pasos a tener en cuenta al momento de cerrar el espacio, que se puede edificar con distintos materiales, como aluminio, acero o madera, entre otros.
Lo recomendable al principio es analizar la funcionalidad del espacio. Siempre se busca maximizar el provecho de cada ambiente priorizando gustos y estilos que propone el cliente, de modo concretar en obra lo que tiene pensado para el hogar.
“En casas a estrenar, las galerías usualmente se ubican entre la cocina y el jardín, para que permitan disfrutar la vista a los espacios verdes y estar cerca de la cocina por la funcionalidad de preparar asados.
Daniela Pérez de Graffe, directora comercial del Grupo Coria, dijo a Infobae que en casas a estrenar, las galerías usualmente se ubican entre la cocina y el jardín “para que permitan disfrutar la vista a los espacios verdes y estar cerca de la cocina, por la funcionalidad de preparar distintos menús o asados”. Con la pandemia, explicó, “se potenció la importancia del compartir en familia y con amigos, y las galerías o quinchos son el lugar ideal para poder reunirnos durante todo el año”.
Circulación
Es aconsejable que tengan buen espacio de circulación para ir y venir con la comida. Por lo general están en el contrafrente de la vivienda y cerca de la piscina.
Esteban Edelstein Pernice, socio de Victoria Homes, comentó que el cerramiento exterior es una tendencia actual en barrios cerrados. El recurso, explicó, “brinda la posibilidad de ganar un ambiente en la casa, funcionando como galería en verano y como quincho en invierno, aprovechando ese sector durante todo el año sin importar los factores climáticos”.
Otras recomendaciones pasan por entender el clima del lugar donde se construye el cerramiento (si es cálido, frio o con gran amplitud térmica), además de la orientación y el uso del espacio donde se colocará.
A partir de eso se puede elegir que tipología y material son convenientes. “Actualmente los más utilizados en casas ya construidas son cerramientos de vidrios plegables sin perfiles en las hojas, generando vistas panorámicas y además con la posibilidad de que los paneles de vidrios sean deslizados por las guías corredizas hasta apilarlos en uno de los extremos permitiendo el uso libre del ambiente en el verano”, agregó Edelstein Pernice.
“Al hacer un cerramiento se brinda la posibilidad de ganar un ambiente más en la casa, funcionando como galería en verano y como quincho en invierno, aprovechando ese sector durante todo el año” (Edelstein Pernice)
Los cerramientos con paneles de vidrio plegables valen aproximadamente $50.000 por metro cuadrado. El más utilizado es el de paneles plegables de vidrio templado de 10 milímetros con perfilería fija de aluminio inferior y superior (guías) fijados al piso, y arriba a una viga o estructura de la casa.
El tiempo de realización depende de la superficie y tipo de abertura, En general, para la provisión de los materiales son unos 45 días, y 2 de instalación en el lugar.
El aluminio como protagonista
Comúnmente en los barrios cerrados se suele hacer una ampliación, algunas viviendas tienen el quincho pero es habitual cerrarlos para el invierno, para que no queden muy expuestos a la intemperie.
“Ahora, si el espacio por cubrir es una prolongación abierta de la casa, y se decide cerrar directamente, es ideal emplear vidrio, incluso en el techo. Así los ambientes que van hacia adentro del hogar no pierden iluminación natural y cuando llueve dan la imagen de una cascada. Se usa DVH laminado de alta prestación y estructura de aluminio”, precisó a Infobae Alberto Martín Frido, de Windoors Aberturas que trabaja junto con Metrar como extrusora de perfiles.
Si el interesado opta por el techo de vidrio, especialistas sugieren que se aplique el DVH con doble cara de laminado y cámara de aire para evitar la condensación que puedan desprender los cristales en verano al transpirar y que puedan generar una barrera de vapor hacia adentro de la vivienda.
Tomando en cuenta la estructura de aluminio con laminado, el valor del m2 para hacer el cerramiento de aluminio y vidrio oscila en los $35.000 instalado, eso incluye la mano de obra, material, zinguerías y bajadas pluviales.
Otra opción
Este tipo de construcciones son ideales realizarlas con materiales como acero y madera, en tecnologías en seco por su sencillez y rapidez, sin contar que son más amigables para las personas que habitan la casa.
“En el caso de la madera podemos sumar el hecho de ser un producto renovable y de menor impacto y con una calidez que difícilmente equiparen otros materiales”, dijo a Infobae Diego García Pezzano, responsable del departamento de arquitectura de la Cámara Argentina de la Madera (Cadamda).
Si bien pueden realizarse adosadas a cualquier ambiente de una vivienda, particularmente son útiles cuando configuran una extensión de salas de estar o comedores.
En caso de construir solo una cubierta, los valores pueden rondar entre los $20.000 a 30.000 por m2. Si la casa cuenta con cerramientos, sean de madera o PVC, los valores aumentan y pueden rondar entre los $20.000 a 50.000 por m2 en relación al tipo de perfil, prestaciones, si se emplean vidrios simples, dobles o de seguridad.
García Pezzano, amplió que “es recomendable que de haber cerramientos laterales, sean practicables en gran parte de su superficie de manera de poder ser empleados todo el año. La apertura puede ser corrediza o tipo plegable para poder generar una apertura completa de las superficies vidriadas”.
Como dato referencial una galería de madera con cerramientos laterales de 30 m2 de superficie puede ser ejecutada entre 15 a 20 días. Los tiempos de obras variarán de acuerdo con la superficie a construir y la mayor o menor complejidad de cada proyecto.
Fuente: infobae